Tratamientos para la dermatitis atópica
No se conoce ningún fármaco que cure la piel atopica, por lo que los medicamentos existentes y recetados por los médicos, sólo consiguen minimizar y prevenir cuadros agudos.
Es importantísimo que el paciente haya sido sometido a las pruebas pertinentes para que exista un diagnóstico médico exacto, y mucho más si hablamos de niños o bebés.
- En todo momento es esencial mantener la zona enferma jugosa y nutrida; las cremas hidratantes específicas para la dermatitis atópica tienen la función de evitar que la piel afectada se reseque y quede dañada, con el consiguiente riesgo de infecciones que agraven la situación.
- Los corticoides tópicos disminuyen la inflamación, pero son medicamentos con tantos y diversos efectos secundarios que, sólo se pueden aplicar un periodo muy corto de tiempo, después debemos de retirarlos y descansar antes de volverlos a aplicar.
- Cuando aparecen las infecciones debemos administrar antibióticos, no olvidar que siempre bajo la receta y supervisión de su médico.
- Los antihistamínicos actúan como sedantes en las horas de sueño, esto será siempre bueno para el paciente y toda la familia, que de éste modo podrán descansar. Cuando hay un afectado de dermatitis atópica en casa, es difícil la convivencia, pero la ansiedad, la frustración y en general el estrés emocional empeoran la enfermedad. Es preciso mantener la calma.